Páginas

¡Feliz San Valentin!

viernes, 14 de febrero de 2014

Quizás yo me haya apoderado de Europa, pero tu te has apoderado de mi corazón

En estos días tan señalados parece ser que todos tenemos un corazoncito.

Los galos debían estar acojonados cuando le venia la regla.

Menudas pasarelas de modelos debía hacer en su barco

y recordad, estos días ser buenos, gran enseñanza del gran Ghandi a Shore

¡'Feliz San Valentin!

Vídeos domingueros

domingo, 9 de febrero de 2014

Ya que hoy es día de pereza máxima en el mundo entero, os traigo un par de vídeos bastante interesantes para que no os tengáis que esforzar leyendo ;D

Los siete genocidios mas grandes de la historia.


El poco conocido escuadrón 731.

Espero que os gusten, ¡disfrutar de las ultimas horas del domingo!

Risas domingueras

No me he podido resistir a ponerla

Y como hace poco hablamos de Blas de Lezo os dejo una de sus grandiosas frases:

Episodios nacionales.

jueves, 6 de febrero de 2014


Hoy he encontrado algo realmente interesante, un pintor llamado Augusto Ferrer-Dalmau Nieto, es un pintor de estilo realista, se dedica a representar momentos bélicos de la historia de España y realmente sus cuadros son muy bonitos, aquí os dejo una galería:
Batalla de Belchite


 Batalla de San Marcial 1813


Caballería española carga en el Desastre de Annual


Carabineros de la Guardia Civil 1805

Don Quijote en Barcelona

El cuarto de husares

El último de Gibraltar

II tercio de Asturias 1690

La toma de Biutz

Oficial del ejercito español, siglo XVII

Batalla de Rocroi, el último tercio

Voljov

Agustina de Aragon

Durante el asedio de Zaragoza, Agustina llevó a cabo la acción que la hizo célebre. Tras haber caído heridos o muertos todos los defensores de la puerta llamada del Portillo, las tropas francesas se aprestaron a tomarla al asalto. Agustina, que llevaba la comida a su marido, tomando la mecha de manos de un artillero herido consiguió disparar un cañón sobre las tropas francesas que corrían sobre la entrada. Dice la leyenda que los asaltantes franceses, temiendo una emboscada, se batieron en retirada, y nuevos defensores acudieron a tapar el boquete, defendiéndose la ciudad una vez más.


El héroe olvidado por su patria.

lunes, 3 de febrero de 2014

     El 3 de febrero de 1689 nació en Pasajes, Guipúzcoa, uno de los más brillantes almirantes que haya dado España y posiblemente el mundo entero: Blas de Lezo y Olavarrieta.

De familia con tradición marinera, a sus 12 años se enrroló en una escuadra francesa en la Guerra de Sucesión Española (1701-1713/15), con la cual participó en la batalla naval de Vélez-Málaga (1704), la más importante del conflicto, perdiendo la pierna izquierda de un cañonazo. Por su valentía fue nombrado Alférez de Bajel de Alto Bordo por el mismísimo Luis XIV. Dos años más tarde, después de romper un asedio naval inglés en Barcelona,  perdería el ojo izquierdo en la defensa, con éxito, de la fortaleza de Santa Catalina de Tolón, asediada por el príncipe Eugenio de Saboya. En 1710, ya Teniente de Guardacostas, rindió 11 navíos ingleses, uno de ellos de 70 cañones, siendo triplicados en número. Cuatro años más tarde, con el rango de Capitán de navío, participa en el asedio de Barcelona donde perdió la movilidad del brazo derecho al acercarse demasiado a las defensas enemigas. Así pues, a la edad de 25 años, el joven Blas de Lezo ya era manco, cojo y tuerto, apodado por ello como el almirante patapalo o el mediohombre. Pero esto no le suponía ninguna debilidad: un año más tarde rindió Mallorca a los ingleses sin disparar ni un solo cañonazo.

    Acabada la Guerra de Sucesión, en 1720 fue enviado al Caribe en una escuadra hispano-francesa al mando del buque insignia Lanfranco, de 62 cañones. Su principal tarea fue la de mantener los mares del Sur (costa del Perú) libre de corsarios y piratas. Tuvo éxito en los 10 años sucesivos hasta que le reclamaron en España, donde le ascendieron a jefe de la escuadra naval del Mediterráneo. Aquí combatió a los piratas argelinos hasta que en 1732 mandó una expedición a Orán con 54 buques y 30.000 hombres que acabaron en la toma de la ciudad, la persecución del líder pirata argelino, Bay Hassan y la destrucción de sus baluartes en la actual Mostaganem. En 1734 fue nombrado teniente general de la Armada y en 1737, comandante general de Cartagena de Indias (actual Colombia); y es aquí donde, 4 años más tarde, logró su más grande hazaña.
Típica batalla naval en las costas mediterráneas entre españoles y corsarios bereberes.

   En 1738 en las costas de Florida un guardacostas español apresó al contrabandista inglés Jenkins, al que le cortó una oreja y le dijo "ve y dile a tu rey que lo mismo le haré si a lo mismo se atreve". Esto se consideró una ofensa al rey Jorge II de Inglarerra y se utilizó como excusa para declararle la guerra ("De la oreja de Jenkins") a España, dado que los ingleses ansiaban controlar los cuantiosos recursos naturales del inmenso Virreinato de Nueva Granada. Después de conquistar la mal defendida Portobelo en 1739(reconquistada años después por los españoles), el almirante inglés Vernon decidió dar el golpe definitivo atacando Cartagena de Indias dos años después con la segunda mayor flota naval reunida en la Historia, siendo solo superada por la empleada en el Desembarco de Normandía.

    El 13 de marzo de 1741, Blas de Lezo avistó las 186 naves que cargaban con 24.000 ingleses (10.000 soldados, milicianos e infantes de marina y 14.000 marineros), 4.000 milicianos coloniales comandados por el hermanastro del futuro presidente de los EE.UU, Lawrence Washington y 3000 cañones. Él solo disponía de 6 naves, 2.400 hombres entre soldados, marineros y milicias, 600 arqueros nativos y 1000 cañones repartidos en las defensas de la ciudad más importante del Caribe. La batalla estaba dispuesta y solo tenía que esperar la llegada del enemigo. Antes de desembarcar, Vernon tuvo que bombardear las baterías y dos fuertes de Bocachica, donde Blas de Lezo mandó hundir 4 de las 6 naves una vez se vieran superadas para dificultar el avance inglés. Lo mismo ocurrió con las 2 naves restantes para entrar en la bahía interior, en cuyo castillo, el de San Felipe de Barajas, se habían refugiado los 600 soldados españoles que quedaban al mando de Lezo después de que los tres fuertes dispuestos se vieron seriamente dañados. En este punto Vernon tenía tan clara la victoria que mandó cartas a Inglaterra contando el éxito de la misión, a raíz de esto se acuñaron monedas conmemorando la humillación del afamado almirante patapalo.
 
    Vernon quería rematar la tarea así que después de bombardear sin descanso la imponente fortaleza, casi inepugnable por el frente, decidió rodearla y desembarcar; esto fue un grave error pues tuvieron que atravesar la selva, donde cientos de británicos, no acostumbrados al clima tropical, contrajeron la malaria. Cuando llegaron a la estrecha rampa que formaba la entrada, Lezo mandó formar una muralla infranqueable de 300 bayonetas a la par que los otros 300 soldados disparaban sin cesar desde lo alto, causando 1500 bajas y la oportuna retirada enemiga. Desmoralizados, cansados, pero aún muy superiores en número a pesar de la epidemia de malaria, los británicos intentaron su asalto final a la fortaleza unos días después, sería de noche y con escalas, para coger desprevenidos a los defensores. Pero Vernon, una vez más, subestimó al astuto mediohombre, que previendo el ataque ordenó excavar un foso alrededor del castillo, quedando las escalas cortas y los británicos confusos y expuestos a un intenso fuego. Los primeros rayos de luz  mostraron los centenares de cadáveres que sembraban los alrededores del castillo, lo que animó a los españoles a hacer una última carga a bayoneta, con la que destrozaron la escasa moral británica y los obligaron a retirarse a los barcos. Vernon no quiso aceptar la derrota y mandó cañonear la ciudad 30 días más, pero el gran número de heridos, enfermos y la falta de provisiones obligaron al almirante inglés a retirarse a Jamaica el 20 de mayo, no sin antes quemar 5 naves por falta de tripulación. Se dice que Lezo pudo oír gritar a Vernon mientras huia: "God damn you, Lezo" (Que Dios te maldiga, Lezo)
 
    Los británicos tuvieron entre 8.000-10.000 muertos y 7.500 heridos, de los cuales la mayoría murieron en el trayecto a Jamaica, por los que algunas fuentes británicas elevan la cifra a 18.000 muertos, entre los que estaban la mayoría de oficiales. También perdieron alrededor de 50 naves, 10 de línea y el resto transportes, además de otras tantas seriamente dañadas, 1500 cañones y multitud de pertrechos. Tardarían bastante tiempo en recuperarse. En el lado contrario, los españoles sufrieron unos 800 muertos y 1200 heridos, 6 naves perdidas, 5 fuertes destruidos, 3 baterías de costa y 395 cañones. Aunque la peor parte se la llevaría Vernon cuando tuvo que informar que el humillado fue él y no el cojo, manco y tuerto. La noticia se extendió como la pólvora y Jorge II prohibió hablar de esta batalla, mientras los españoles se reían con las monedas acuñadas por los ingleses en mano. La guerra se fundiría más tarde con la Guerra de Sucesión Austríaca por lo que no se firmó una paz, favorable a los españoles, hasta 1748.

   El gran número de cadáveres en las inmediaciones de la ciudad provocaron la muerte en septiembre de 1741 del hombre que prorrogó la supremacía española en América  por 64 años más, hasta Trafalgar, e indirectamente permitió la posesión de unos territorios y redes defensivas en el Caribe que contribuyeron a la independencia de las 13 colonias inglesas. Esta fue la vida de un brillante estratega militar, llena de éxitos y un gran nº de buques hundidos que la gente desconoce, la vida de un hombre que la Historia no ha sabido tratar, la vida del héroe olvidado por su patria.

 
 
Estatua de Blas de Lezo, con el castillo de San Felipe al fondo, Cartagena de Indias.




Moneda inglesa acuñada tras conocer la carta de Vernon, se ve a Blas de Lezo arrodillado ante este.

La batalla de Stalingrado

domingo, 2 de febrero de 2014

La batalla de Stalingrado fue una de las batallas mas importantes de la Segunda Guerra Mundial, no solo porque marco un punto patriótico a la lucha soviética, si no que la derrota alemana en esta batalla fue el preámbulo de su posterior derrota en la guerra. Hoy se hace 71 años de que las tropas alemanas se rindieran ante el imparable avance del ejercito ruso. Aquí os traemos una recopilación de fotografías tomadas en la batalla:

                                      Soldados rusos luchando contra los alemanes
                                          Soldados en una trinchera
                                         Entrada de los alemanes en Stalingrado
                     Civiles se refugian fuera de la ciudad por los continuos bombardeos.
                                           
Artillería alemana castiga las posiciones soviéticas
Soldado alemán camuflado de blanco se mueve de posición
Soldados alemanes pasean por Stalingrado
Alemanes se refugian del fuego ruso
Mujeres soviéticas ayudan a los soldados
Soldados nazis atrapados por los soviéticos
Stalingrado desde el aire
Soldados rusos celebrando la inminente victoria
Soldado alemán antes de rendirse
Alemanes rindiéndose
Winston Churchill entrega a su aliado Joseph Stalin la espada de Stalingrado como reconocimiento a la resistencia del pueblo ruso.



Tiene tres mensajes nuevos

sábado, 1 de febrero de 2014


El gran sueño de Martin Burguer King

jueves, 30 de enero de 2014







Lo nunca dicho de España

domingo, 26 de enero de 2014

Para haceros más amenas las ultimas horas de este domingo, os hemos traído un conjunto de frases dichas por personajes ilustres sobre nuestra querida España, aquí están:


''No hay puñado de tierra sin una tumba española.'
Libro de los Tercios españoles

"Los infantes españoles prefieren la muerte a la deshonra. Ya hablaremos de capitulación después de muertos" Tercio de Zamora a las ordenes del Maestre de Campo Francisco de Bobadilla.

"Decidle a Vernon que para venir a Cartagena es necesario que el rey de Inglaterra construya otra escuadra mayor, porque esta sólo le ha quedado para conducir carbón de Irlanda a Londres, lo cual les hubiera sido mejor que emprender una conquista que no pueden conseguir."
Blas de Lezo, en respuesta a la carta de Vernon tras su desastre en Cartagena de Indias.

"España mi natura, Italia mi ventura, Flandes mi sepultura."
Lema de los Tercios

"Tengo por enemigo a una nación de doce millones de almas, enfurecidas hasta lo indecible. Todo lo que aquí se hizo el dos de mayo fue odioso. No, sire. Estáis en un error. Vuestra gloria se hundirá en España” Carta de Jose I a su hermano Napoleón.

"Si en el frente os encontráis a un soldado mal afeitado,
sucio, con las botas rotas y el uniforme desabrochado,
cuadraos ante él, es un héroe, es un español..."
Jürgens, General de Artillería
Comandante General del XXXVIII, Cuerpo de Ejército de la Wehrmacht

“Y aquí se verá si los argentinos son en realidad descendientes de los españoles la batalla será ardua y difícil para los nuestros, si en cambio lo son de italianos, la batalla se decidirá en cuestión de horas”.
General Británico anónimo, en referencia a la Guerra de la Malvinas.

“Este país es ingobernable”.
Amadeo de Saboya.

“Con soldado español y mando alemán conquistaré el mundo”.
Adolf Hitler

Ni hablar. Los españoles son el único pueblo mediterráneo verdaderamente valiente e immediatamente organizarían guerillas en nuestra retaguardia. No se puede entrar en España sin permiso de los españoles. Hitler, luego de invadir Francia, cuando algunos generales le propusieron también invadir España.

Tras la batalla de Bailén,el general Castaños y sus tropas acampan y reciben la visita de un General "de salón".
"¿Pretendes entrar en Madrid con éstos desarrapados?"
"Con ellos entré en Bailén y era mas difícil"

"Todo mi mal empezó con la maldita guerra de España"
"Si queremos dominar el mundo, antes debemos anexionarnos a los vecinos del sur, su arrojo y valentía nos dará las victorias que necesitamos."
 Napoleón

“España es el país más fuerte del mundo, lleva siglos tratando de destruirse a si misma y todavía no lo ha conseguido”.
Otto Von Bismarck

La resistencia del honor

lunes, 20 de enero de 2014

La muerte de Hiroo Onoda  a los 91 años de edad en Tokyo el pasado 16 de enero de 2014 nos hizo recordar uno de los casos más curiosos de toda la Segunda Guerra  Mundial,  el ejemplo de la cabezonería de un pueblo por la resistencia de sus ideales.

Os pondré en situación, Hiroo Onoda fue teniente del ejército nipón durante la Segunda Guerra Mundial. Fue instruido como oficial de instrucción  y de tácticas de guerrilla. En 1944 con la vista de la derrota cerca, el ejército nipón manda a este teniente acompañado con un grupo de soldados bajo sus ordenes para resistir en la isla de Lubang (Filipinas).


                                                        Hiroo Onoda antes de ir a Lubang

Al poco de ocurrirse el desembarco solo sobrevivieron unos tres soldados y Onoda, los tres soldados eran el soldado Yuichi Akatsu, el cabo Shoichi Shimada y el soldado de primera clase Kinshichi Kozuka. Al verse superados en número tuvieron que esconderse en las colinas y empezar a luchar con técnicas de guerrilla.

Después de la rendición japonesa, los soldados recibieron folletos y todo tipo de pruebas de la finalización del conflicto, pero Onoda y sus soldados desconfiaban de las técnicas que serian capaces de utilizar para acabar con ellos, por eso decidieron ignorar estas pruebas y continuar con su particular lucha.

Yuichi Akatsu se empezó a separar de ellos en 1949 para acabar entregandose a las fuerzas filipinas.

Después de otro intento de hacer que los soldados se rindieran (esta vez con fotos de familiares como prueba) Shimada fue herido de muerte por un grupo de hombres de la localidad que les estaban buscando el 7 de mayo de 1954.

Unos años después Kozuka murió también durante una de las incursiones de la guerrilla que realizaban en los campos de arroz en 1972.

En 1974 Hiroo Onoda se encontraba totalmente solo cuando un estudiante japones llamado Norio Suzuki apareció en su búsqueda. Le contó que era famoso en Japón y que había comenzado una búsqueda por todo el mundo de el teniente Onoda, un panda, y el Abominable Hombre de las Nieves, en este orden. Al poco se hicieron amigos, ya que Suzuki sentía una gran admiración por el teniente, el le contó que se había convertido en una leyenda en Japón y que hacía 29 años que la guerra había terminado, pero Onoda insistió en que hasta que no le dieran la orden de rendirse directamente de su superior, él no abandonaría su misión.

Suzuki al volver a Japón se puso en contacto con el gobierno nipón y les mostró las fotos para demostrar que hablo con Hiroo Onoda. El gobierno japones se puso manos a la obra en localizar al mayor Taniguchi (superior que le dio la orden de ir a Lusbang) que después de la guerra se convirtió en librero. Al enterarse de la situación, cogió un avión y se dirigió a Lusbang para ordenar a Hiroo Onoda deponer las armas

Así es como después de 29 años de haber finalizado la guerra, el teniente Hiroo Onoda depuso sus armas y dio por finalizada su la lucha de su vida.

                                                             Hiroo Onoda entregándose

Aunque parezca increíble no fue el ultimo soldado nipón en rendirse, ese merito se lo lleva el soldado Teruo Nakamura que estuvo luchando 7 meses mas que el teniente.

La historia de Hiroo Onoda es el ejemplo de un pueblo dispuesto a morir por sus ideales o mirándolo desde otro punto de vista, como los absolutismo contaminan a la gente con ideales tan férreos. Sea como sea por donde lo mires, esta es la historia de un hombre valeroso que prefirió dar su vida a una causa antes que perder su orgullo.

Cáncer histórico.

Circulando por este mundo que es internet, he encontrado una serie de imágenes cancerígenas como mínimo las cuales he decidido que era necesario compartir con vosotros.
Aquí están:
                                                           

Napoleón bogavante



Martin Burger King




Canal Historia

viernes, 17 de enero de 2014


Definición gráfica del Canal Historia, ademas de poner a los ingleses y norteamericanos como semi-dioses y libertadores de la oscuridad y el absolutismo.